El hacerse la pregunta ¿quién soy? no es algo tan simple de responder ya que implica indagar a fondo en cuál es la “esencia” de mi existencia. Para hacer esto un poquito más sencillo de entender (eso espero) voy a involucrar algo de teoría científica. Según la teoría de la relatividad desarrollada por Albert Einstein en el año de 1905, todo evento físico en el universo se lleva a cabo dentro de una entidad geométrica llamada espacio-tiempo, (y la gente dice que la biblia es difícil de entender) en palabras simples esto es, que todo lo que vemos ocurre en un momento y en un lugar único y gracias a esto es posible identificar la existencia de algo, nosotros en este momento presumimos que existimos debido a que tenemos conciencia de que nos encontramos en este lugar geográficamente ubicado y en este preciso instante. En pocas palabras para contestar a la pregunta ¿Quién soy yo? No tenemos que apartarnos de la civilización y entrar en una caverna en algún lugar remoto y charlar con nuestro yo interno, ni tenemos que hacer meditación con respiraciones controladas, ni dejar nuestra mente en blanco; simple y sencillamente necesitamos descubrir tres aspectos de nuestra vida: ¿De dónde vengo?, ¿Donde me encuentro?, ¿Y a donde voy?, Puedo asegurarte que en este momento esas pensando: antes quería contestar una pregunta y ahora debo contestar tres más y luego comienza a surgir otra pregunta en tu cabeza… y ¿cómo se supone que debo de contestar estas tres preguntas? ¡Aguarda un momento!, déjame compartirte un principio bíblico que te ayudará con esto. En el libro de Santiago 1:5-6 dice así: “Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada. Pero pida con fe, no dudando nada; porque el que duda es semejante a la onda del mar, que es arrastrada por el viento y echada de una parte a otra.” Así que, repite estas palabras: Señor, te pido con fe, dame sabiduría, dámela en abundancia y sin reproche, AMEN.
Si notas bien las preguntas que planteamos anteriormente tienen algo que es constante en cada una de ellas; Todas preguntan por una ubicación y cada una pertenece a un tiempo diferente, la primera al pasado, la segunda al presente y la tercera al futuro. Ahora, pon atención a esto, Jesucristo en su revelación a Juan en la isla de Patmos, se describió a sí mismo como El Alfa y el Omega, principio y fin, el que es, el que era y que ha de venir, el Todopoderoso (Apocalipsis 1:8) …espacio-tiempo.
¿De dónde vengo?
La Biblia nos enseña que fuimos creados por Dios y que nos hizo a su imagen y conforme a su semejanza, y que sopla su aliento de vida y nos da la vida (Genesis 1:26-27) y a pesar de la consecuencia del pecado de desobediencia cometido por el hombre, el Señor nos llama a ser Linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios para anunciar las virtudes del que nos llamó de las tinieblas a su luz admirable. (1 Pedro 2:9) así que, tomando esto en cuenta no es muy difícil reconocer nuestro origen, ¿o sí? Somos nacidos de Él y hechos para su perfecta alabanza y hora sabemos de dónde venimos, cual es nuestro origen pero, ¿De dónde vengo yo? personal e individualmente, quien era yo ayer, ¿mi pasado refleja el propósito para el que fui creado?, quizás estas recordando en este momento tu vida en el fango del pecado o quizás no, pero te tengo una noticia; tu pasado… no lo necesitas; La palabra dice que nuestro Dios olvida nuestros pecados y los deposita en lo profundo del mar porque Él se deleita en misericordia. (Miqueas 7:18-19)
¿Dónde me encuentro?
A mí siempre me han gustado las mascotas y recuerdo que años atrás yo me pasaba tardes completas haciendo casitas para hámsteres, terrarios para reptiles, también me ingeniaba juegos para que mis animalitos se divirtieran, pero nunca hacían lo que yo quería, si les hacia una cama se hacían popo en ella, si les ponía un plato de comida lo tiraban y todo esto era una frustración enorme. Ahora que cuento con hijos espirituales (porque aun no soy un padre de familia) me deleito en ver cuando alguno de ellos da testimonio de vivir una vida recta delante de Dios, ya que es algo que yo le enseñe, pero lo que hace la diferencia es que el que tuvo la idea maestra fue nuestro Señor y padre Jehová y eso es una garantía de éxito en la vida de una persona.
Según nuestro manual de operaciones (La Biblia) yo no solamente estoy hecho para perfecta alabanza a Dios, sino que también soy considerado amigo de Jesús, ¿Sabias esto?, en el libro de Juan 15:15 dice: “Ya no os llamaré siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor; pero os he llamado amigos, porque todas las cosas que oí de mi Padre, os las he dado a conocer.” Y eso no es todo porque además de esto se nos ha dado la potestad de ser llamados hijos de Dios. “A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron. Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios; los cuales no son engendrados de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de Dios.” Juan 1:11-13 Ahora, pon atención en que en este verso dice, “a los que le recibieron”, lo que significa que debes de recibirle para hacerte acreedor a este linaje real. El día de hoy yo te invito a que pienses una vez más ¿he recibido realmente a Jesucristo en mi corazón? Y también te invito a que dejes atrás el pasado, recuerda que está sepultado en lo más profundo del mar. Abre tu corazón y dile al Señor, entra en mi corazón para así poder comprender completamente tu amor y poder ser lleno de tu plenitud. AMEN (Efesios 3:16-19) Así que ahora si tú has recibido a Cristo en tu corazón puedes estar seguro de donde te encuentras ahora ante los ojos de Dios has sido encontrado y no estás más perdido.
¿A dónde voy?
Puede ser que tu pasado haya sido en el fango, y que tú presente también, pero ahora que estás seguro de que Jesucristo te ha lavado para ser nueva criatura, y para saber quién eres completamente, tienes que saber ¿Qué es lo que nos espera a los que vivimos o morimos en Cristo? Aparte de un sin fin de bendiciones, promesas y dadivas que vamos a recibir en nuestra vida en este mundo y que están escritas, que además para mí es imposible enseñártelas en este tiempo, voy a dejar que la palabra de Dios te de las buenas nuevas de salvación.
En 1 Tesalonicenses 4:15-17 dice:“Por lo cual os decimos esto en palabra del Señor: que nosotros que vivimos, que habremos quedado hasta la venida del Señor, no precederemos a los que durmieron. Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero. Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor.” Porque así es como la tradición del pueblo de Israel hacia las bodas antiguamente. Después de haberse desposado, el novio se iba a prepara el lugar donde deberían de vivir y una vez terminado el lugar, el padre del novio daba la aprobación y entonces el novio iba en busca de su esposa y la esposa debía de estar al pendiente para que cuando se escuchara el clamor ella saliera a encontrarse con él. ¿Ves? Como iglesia somos la amada esposa de Jesucristo y debemos de permanecer al pendiente para el momento de su venida.“Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente.” Apocalipsis 22:17
Si notas bien las preguntas que planteamos anteriormente tienen algo que es constante en cada una de ellas; Todas preguntan por una ubicación y cada una pertenece a un tiempo diferente, la primera al pasado, la segunda al presente y la tercera al futuro. Ahora, pon atención a esto, Jesucristo en su revelación a Juan en la isla de Patmos, se describió a sí mismo como El Alfa y el Omega, principio y fin, el que es, el que era y que ha de venir, el Todopoderoso (Apocalipsis 1:8) …espacio-tiempo.
¿De dónde vengo?
La Biblia nos enseña que fuimos creados por Dios y que nos hizo a su imagen y conforme a su semejanza, y que sopla su aliento de vida y nos da la vida (Genesis 1:26-27) y a pesar de la consecuencia del pecado de desobediencia cometido por el hombre, el Señor nos llama a ser Linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios para anunciar las virtudes del que nos llamó de las tinieblas a su luz admirable. (1 Pedro 2:9) así que, tomando esto en cuenta no es muy difícil reconocer nuestro origen, ¿o sí? Somos nacidos de Él y hechos para su perfecta alabanza y hora sabemos de dónde venimos, cual es nuestro origen pero, ¿De dónde vengo yo? personal e individualmente, quien era yo ayer, ¿mi pasado refleja el propósito para el que fui creado?, quizás estas recordando en este momento tu vida en el fango del pecado o quizás no, pero te tengo una noticia; tu pasado… no lo necesitas; La palabra dice que nuestro Dios olvida nuestros pecados y los deposita en lo profundo del mar porque Él se deleita en misericordia. (Miqueas 7:18-19)
¿Dónde me encuentro?
A mí siempre me han gustado las mascotas y recuerdo que años atrás yo me pasaba tardes completas haciendo casitas para hámsteres, terrarios para reptiles, también me ingeniaba juegos para que mis animalitos se divirtieran, pero nunca hacían lo que yo quería, si les hacia una cama se hacían popo en ella, si les ponía un plato de comida lo tiraban y todo esto era una frustración enorme. Ahora que cuento con hijos espirituales (porque aun no soy un padre de familia) me deleito en ver cuando alguno de ellos da testimonio de vivir una vida recta delante de Dios, ya que es algo que yo le enseñe, pero lo que hace la diferencia es que el que tuvo la idea maestra fue nuestro Señor y padre Jehová y eso es una garantía de éxito en la vida de una persona.
Según nuestro manual de operaciones (La Biblia) yo no solamente estoy hecho para perfecta alabanza a Dios, sino que también soy considerado amigo de Jesús, ¿Sabias esto?, en el libro de Juan 15:15 dice: “Ya no os llamaré siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor; pero os he llamado amigos, porque todas las cosas que oí de mi Padre, os las he dado a conocer.” Y eso no es todo porque además de esto se nos ha dado la potestad de ser llamados hijos de Dios. “A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron. Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios; los cuales no son engendrados de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de Dios.” Juan 1:11-13 Ahora, pon atención en que en este verso dice, “a los que le recibieron”, lo que significa que debes de recibirle para hacerte acreedor a este linaje real. El día de hoy yo te invito a que pienses una vez más ¿he recibido realmente a Jesucristo en mi corazón? Y también te invito a que dejes atrás el pasado, recuerda que está sepultado en lo más profundo del mar. Abre tu corazón y dile al Señor, entra en mi corazón para así poder comprender completamente tu amor y poder ser lleno de tu plenitud. AMEN (Efesios 3:16-19) Así que ahora si tú has recibido a Cristo en tu corazón puedes estar seguro de donde te encuentras ahora ante los ojos de Dios has sido encontrado y no estás más perdido.
¿A dónde voy?
Puede ser que tu pasado haya sido en el fango, y que tú presente también, pero ahora que estás seguro de que Jesucristo te ha lavado para ser nueva criatura, y para saber quién eres completamente, tienes que saber ¿Qué es lo que nos espera a los que vivimos o morimos en Cristo? Aparte de un sin fin de bendiciones, promesas y dadivas que vamos a recibir en nuestra vida en este mundo y que están escritas, que además para mí es imposible enseñártelas en este tiempo, voy a dejar que la palabra de Dios te de las buenas nuevas de salvación.
En 1 Tesalonicenses 4:15-17 dice:“Por lo cual os decimos esto en palabra del Señor: que nosotros que vivimos, que habremos quedado hasta la venida del Señor, no precederemos a los que durmieron. Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero. Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor.” Porque así es como la tradición del pueblo de Israel hacia las bodas antiguamente. Después de haberse desposado, el novio se iba a prepara el lugar donde deberían de vivir y una vez terminado el lugar, el padre del novio daba la aprobación y entonces el novio iba en busca de su esposa y la esposa debía de estar al pendiente para que cuando se escuchara el clamor ella saliera a encontrarse con él. ¿Ves? Como iglesia somos la amada esposa de Jesucristo y debemos de permanecer al pendiente para el momento de su venida.“Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente.” Apocalipsis 22:17
